
Bajo las poderosas luces en el salón del hotel Sheraton, adecuado como estudio de televisión, la barranquillera juguetea con el pelo ahora más rubio, teclea en su 'blackberry' y de vez en cuando mira a sus asistentes para saber si todo está listo para comenzar la siguiente entrevista.
Son las 11:30 de la noche. El sudor corre a chorros por mi cara y nuestra cantante más internacional permanece fresca, sin siquiera tener necesidad de retocarse el maquillaje y solo repasando el color de sus labios para arrancar. 'Me estoy deshidratando', le digo. "Pues yo en cambio ni en los conciertos sudo y eso dicen que puede ser un problema". "Eso se llama anhidria -nos contaría un médico consultado después-. No es peligroso para el cuerpo pues aunque cuando se suda se eliminan toxinas, el cuerpo entonces las elimina de otra manera"..... Seguir leyendo